Las historias detrás de Diego Armando Maradona siempre magnifican y se hacen cada vez más fuertes.
En este caso se trata del arquero Gaspar Servio, quien fue entrenado por El Diez en su paso por Dorados de Sinaloa, México, donde Servio tuvo dos pasos: uno en la temporada 2016/2017 y otro entre 2018 y 2020. En este último compartió vestuario con Maradona, DT del equipo mexicano entre 2018 y 2019.
Ahora, Servio es el arquero de Guaraní, que marcha sexto en el Torneo Apertura de Paraguay, con 21 puntos en 15 partidos. En la última fecha que disputó, ante Nacional, el argentino metió un gol de penal, algo ya habitual en su carrera. Pero este gol fue especial: con el nuevo festejo, Servio llegó a los nueve goles en el fútbol paraguayo, pasó definitivamente los ocho de Danilo Aceval y se convirtió en el arquero con más goles en la copa de ese país, informó en Twitter el periodista oriundo de ese país Carlos Miranda, quien comparte usualmente estadísticas del fútbol paraguayo.
La relación entre Servio y Maradona
En 2022, el arquero reveló detalles sobre su vínculo con Maradona durante su tiempo compartido en Dorados de Sinaloa. “La experiencia con Diego fue única. Desde el primer día, desde que bajó lo esperaba con una ansiedad impresionante”, contó en una entrevista que dio en enero de 2022, donde contó que la primera vez que lo vio se le “erizó la piel”, pero aclaró: “Todos los días sentía lo mismo”
“Me dijo: ‘Yo tengo un hermano, que fue tu papá en Banfield, que es el Pelado Almeyda. Si él te quiere como un hijo, yo también te voy a querer. Vas a ser mis ojos en el vestuario, vas a motivar como yo lo necesito y vas a ser mi capitán'”, recordó Servio en aquella nota que dio hace poco más de dos años.
Además de opinar que, durante su paso como DT de Dorados, Maradona “hizo vivir a los mexicanos del mismo modo que se vive acá”, añadió: “En la derrota, jamás se la iba a agarrar con un jugador. Errores había muchísimos, pero si se tenía que enojar con alguien, se enojaba con un dirigente. Si no pagaban, pagaba él. Por el jugador, él daba la vida. Era terrible.
