Vélez, que jugó con diez gran parte del partido por la temprana expulsión del delantero Braian Romero, alcanzó el empate en cero ante Argentinos Juniors y luego lo eliminó en la tanda de penales, al vencer por 4 a 2. Todo se dio en marco de las semifinales de la Copa de la Liga, por lo que el Fortín ahora espera en la final a Boca o Estudiantes.
El encuentro, parejo desde el desarrollo, se llevó adelante en el estadio Único de San Nicolás de los Arroyos. Durante el tiempo regular hubo ocasiones para los dos equipos y la falta de efectividad determinó el resultado y trasladó la definición a los 12 pasos, donde la falta de eficacia que Argentinos había mostrado ante Defensa y Justicia se repitió pero esta vez con resultado en contra, y una actuación destacada del arquero Tomás Marchiori en el Fortín.
El Fortín inició pateando pero el remate de Juan Ignacio Méndez fue detenido por Diego Rodríguez. Gastón Verón anotó seguidamente. Thiago Vecino igualó las acciones y luego Leonardo Heredia desaprovechó su chance de aventajar al Bicho al rematar por encima del travesaño. Joaquín García puso en ventaja a Vélez y Franco Moyano lo igualó. Santiago Cáseres anotó un remate esquinado para los de Liniers y Luciano Gondou volvió a errar para el Bicho (lo había hecho ante Defensa) para darle la ventaja clave. Lenny Lobato tomó la pelota definitiva y anotó para el pase a la final.
En el medio de la definición desde los nueve pasos, la transmisión oficial pudo enfocar un papel que portaba el arquero de Vélez, el mendocino Tomás Marchiori, en el que tenía anotado dónde iba a ejecutar cada futbolista de Argentinos, que terminó siendo determinante.
En la imagen se ve una lista de anotaciones encabezada por la de Gondou, al que se le advierte su condición de zurdo y su intención de cruzarla. Finalmente, Marchiori se lanzó a su palo izquierdo haciendo caso al machete y tapó el remate. Otra anotación decía “Heredia (derecho) la cruza”, y fue justamente él quien erró el otro remate. También había coincidido con el machete pero su remate se terminó elevando por encima del travesaño por lo que no fue necesaria la intervención de Marchiori.
De esta manera, el equipo de Liniers, que clasificó de manera agónica entrando por la ventana a los cuartos de final de la Copa de la Liga, terminará jugando la final ante el ganador de Estudiantes y Boca.
