El mediocampista de Racing, Juan Fernando Quintero abrió su corazón para hablar sobre un momento difícil en su vida: la delicada situación de salud que atravesó su esposa, Johana Osorio.
“Donar sangre es vital, y puedo decirlo desde la experiencia. Las plaquetas salvaron a mi señora, fue un milagro de vida. Hoy podemos contarlo, pero en ese momento todo era incertidumbre y tristeza”.
Quintero recordó cómo una inmensa cadena de oración y la solidaridad de más de mil donantes de sangre ayudaron a su familia a superar esta dura prueba. Su mensaje es claro: donar sangre no solo puede salvar vidas, sino también unir a las familias en los momentos más oscuros.
El diagnóstico médico de su esposa requirió transfusiones constantes, y la campaña en redes sociales para conseguir donantes de sangre A+ tuvo una respuesta abrumadora. La recuperación de Johana es un recordatorio de la importancia de la donación y la fe: “Fue un año difícil, pero lo superamos gracias a nuestra conexión con Dios y al apoyo de tantas personas. Hoy, Johana está con nosotros, aunque debemos realizar controles cada seis meses. Es algo con lo que aprendimos a convivir”, explicó el jugador de Racing para la entrevista que tuvo con La Nación.
Quintero también reflexionó sobre cómo estos desafíos refuerzan su fe y gratitud, ya que desde su infancia en la Comuna 13 de Medellín, donde enfrentó una violencia extrema, hasta el presente, el mediocampista ha encontrado en la espiritualidad un refugio: “Mi abuela me inculcó el valor de la oración y el agradecimiento. Hoy sé que Dios estuvo con nosotros todo el tiempo, y es algo que jamás negociaré en mi vida”.
El colombiano, conocido por su carácter reservado, eligió esta vez compartir su historia para dar un mensaje de esperanza y solidaridad. Además, destacó la importancia de los lazos familiares y de quienes lo apoyaron en este tiempo, incluyendo a su entrenador Marcelo Gallardo, a quien considera parte de su familia: “En momentos difíciles, siempre estuvo para mí. Eso es algo que nunca olvidaré”.J
La experiencia vivida por Quintero lo llevó a asumir un compromiso personal: concientizar sobre la importancia de donar sangre: “Es algo que salva vidas, literalmente. Si alguien tiene dudas, les digo que es un acto de amor que puede marcar la diferencia. Nosotros somos un testimonio de eso”, concluyó.
