Se trata de dos futbolistas de Gimnasia y Tiro, quienes fueron desvinculados recientemente. Cómo sucedieron los hechos.
Gimnasia y Tiro de Salta suma un nuevo escándalo a su complejo presente: dos jugadores rescindieron sus contratos en medio de amenazas por apuestas deportivas.
Los futbolistas desvinculados son Luis Olivera y Marcelo Herrera, aunque de este último todavía no se oficializó. Los deportistas llegaron a principios de año y el escándalo registrado en los últimos días desencadenó el cierre de la relación contractual.
“El Club de Gimnasia y Tiro informa que Luis Olivera dejó de pertenecer a la institución. El futbolista rescindió su contrato por cuestiones personales y de común acuerdo entre las partes. Les deseamos éxitos en su carrera”, asegura la institución en un comunicado.
¿Qué fue lo que ocurrió?
Dos personas abordaron a dirigentes del club reclamando por la deuda de uno de los futbolistas presuntamente ligada a las apuestas deportivas.
Desde Gimnasia y Tiro hablaron con el jugador, quien les reconoció su problema de adicción con el juego y solicitó rescindir el vínculo debido a que esto le afectaba en la actividad profesional. Cabe remarcar que se encuentra con asistencia profesional.
En tanto, los dos individuos que increparon a los dirigentes no volvieron a mostrarse en las inmediaciones del club y manifestaron que se acercaron a las instalaciones debido a que el futbolista no pagaba su deuda por incumplimientos de Gimnasia y Tiro.
El partido que sembró las sospechas
El diario El Tribuno señala que, a partir de la denuncia por apuestas, llamó la atención las amonestaciones que recibió Olivera durante el encuentro ante Deportivo Madryn: vio la primera amarilla a los 35 minutos y luego la segunda al minuto del inicio del complemento.
