Boca Juniors recomendó a sus hinchas que viajen a presenciar la final de la Copa Libertadores ante Fluminense en Río de Janeiro que se abstengan de realizar “cantos y gestos racistas”, considerados un “delito grave” para la justicia de Brasil.
En un comunicado publicado este domingo con pautas de buen comportamiento, el club alertó sobre el riesgo de una sanción “de hasta 5 años de prisión no excarcelable” para aquellos hinchas que ofendan al pueblo brasileños con burlas raciales, conductas que han generado problemas durante esta misma edición de la Libertadores.
“Evitar cualquier tipo de provocación al pueblo brasileño”, solicitó el club, entre diferentes solicitudes.
“El consumo de estupefacientes es gravemente sancionado en Brasil”, “usar únicamente entradas obtenidas a través de los canales oficiales”, “viajar con seguro de amplia cobertura, que brinde asistencia legal”, son otras de las recomendaciones que publicó la cuenta de Socios de Boca, que puso a disposición la dirección y el contacto del Consulado Argentino en Río de Janeiro.
La Conmebol reservó para el club argentino unas 20.000 entradas generales a un valor de 39.000 pesos que fueron agotadas el sábado pasado en menos de dos horas.
Se calcula que por lo menos 50.000 hinchas “xeneizes” viajarán a Río de Janeiro para acompañar al equipo de cerca, en la misma ciudad sede de la final en la que Boca intentará conseguir su séptima Libertadores.
Los hinchas de Boca compraron entradas de categoría 3 para la popular Sur del mítico estadio. Las de categorías 1 y 2 fueron adquiridas por simpatizantes de ambas parcialidades, sin reservada previa.
Los controles de seguridad en las inmediaciones del recinto serán con cuatro postas. El objetivo será evitar que haya hinchas colados e infiltrados de ambas parcialidades.
El ingreso se realizará mediante un QR dinámicos, que se actualizará cada 15 minutos para evitar el acceso con tickets falsos.
El comunicado del club: