Barras bravas de Vélez Sarsfield amenazaron este viernes al plantel en la Villa Olímpica, tras ingresar por la fuerza al predio que el club posee en Parque Leloir. Luego de interceptar y apretar a varios futbolistas, se marcharon minutos antes de que llegara la Policía.
El fútbol argentino vivió otro triste episodio relacionado a la violencia y amenazas. Cuando el equipo de Ricardo Gareca se encontraba practicando en las canchas del fondo, 12 personas se bajaron de tres autos y se dirigieron hacia la entrada del predio. Cuando se percataron que la empleada de seguridad no los iba a dejar ingresar, rompieron la barrera de forma violenta y cumplieron su cometido.
Como el plantel de Primera se encontraba a una distancia lejana, se detuvieron cerca de los vestuarios a esperar a los jugadores, donde los fueron interceptando uno a uno. Según contó TyC Sports, cuando se fueron aproximando los referentes, Lucas Pratto, Lautaro Giannetti, Lucas Janson y Diego Godín, mantuvieron contacto 15 minutos, les habrían exigido mayor compromiso y hasta cantaron la característica canción “la camiseta de Vélez se tiene que transpirar”, en un evidente apriete a plena luz del día.
Al momento que sucedían las amenazas, el eprsonal de seguridad dio aviso de la situación a la comisaría tercera de Ituzaingó, ante el peligro que los hechos pasen a un peligro aún mayor. Tras detener a los futbolistas más reconocidos del plantel, los barras se marcharon rápidamente por el mismo lugar en el que llegaron, instantes antes de que los patrulleros policiales se hicieran presentes.
