River es River y cuando se enfrenta a un rival sin un esquema futbolístico, el “millonario” no perdona. Es por eso que el equipo de Núñez derrotó a Central Córdoba por 2 a 0 por la primera fecha de la Liga Profesional de fútbol.
Ignacio Fernández y Pablo Aimar marcaron los goles en el encuentro a estadio pleno, que mas allá del resultado, dejó en evidencia que el fútbol es una verdadera fiesta.
El conjunto “ferroviario” no tuvo ideas, quizás sea propio de un primer partido con un equipo prácticamente nuevo, con jugadores que jugaron poco juntos y eso sea un justificativo por el momento.
River por su parte, mostró sus credenciales colectiva e individuales, con “Nacho” Fernández siendo el conductor, acompañado por Aliendro y Paradela, quienes fueron los ejecutores de las ideas de Demichelis.
En el primer tiempo tuvo un remate en el palo de Fernández y fue precisamente “Nacho” que abrió el marcador en el epílogo del primer tiempo tras un remate rasante que batió a Ledesma.
Justo y merecido.
En el complemento, la novela siguió con el mismo libreto. River siendo el dueño del balón, la “Nacho” Fernández “moviendo los hilos” en la mitad de la cancha y un Central Córdoba intentando “sacar los colmillos”, pero no fue suficiente.
A los 23m. Pablo Solari con un golazo de derecha, que la puso en el ángulo izquierdo de Ledesma, sentenció la historia.
Central Córdoba fue un cúmulo de voluntades y careció de fútbol. Lo positivo además fue los minutos que jugó el “Pulga” Rodríguez, que nada pudo hacer ante la superioridad de River.
Seguramente con el correr de los partidos, Madelón “aceitará” la máquina, acomodará las piezas. Que sea pronto, porque en el horizonte “ferroviario” aparece otro grande: Boca Juniors.
EL GOLAZO DE SOLARI
