“Me he acostumbrado mucho a la filosofía de vida que hay en esta parte del mundo y me siento cómodo. Me encantaría trabajar en el país, pero no la tuve en los últimos ocho meses y cuando tuve esta posibilidad la tomé”. Así describió Mario Gómez su ya extensa relación con el continente asiático que sumó un nuevo capítulo en Bangladesh.
El entrenador de 68 años, surgido de las entrañas de Kimberley de su natal Mar del Plata como jugador, desembarcó días atrás en la octava nación más poblada del mundo y cuya cultura tiene como sonido el compas del Gombhira, Bhatiali y del Bhawaiya y cuyo deporte de masas al igual que los países otrora colonias inglesas es el Criquet.
El ex coordinador de numerosos elencos en la Argentina no es ajeno a las experiencias orientales. Sus pasos por South China de Hong Kong, Persib Banding, Borneo FC y Arema FC de Indonesia y el Johor Darul Takzim y la Selección de Malasia nutren su carrera en el otro extremo del mapa.
A sus más de veinte años como DT este jueves se le sumó un nuevo título, en su debut oficial en Bangladés. Los Bashundhara Kings de la Premier League local derrotaron 4 a 1 a Mohammedan SC para adjudicarse la Challenge Cup, trofeo disputado entre los vencedores de la liga y copa doméstica de la temporada anterior.
El doblete de Dorielton y los tantos de Raphael Augusto y Sunday Emmanuel le dieron la coronación a la escuadra de la capital en el Shaheed Dhirendranath Datta Stadium de Comilla con capacidad para 18.000 espectadores, y a la postre, un inicio inmejorable para un Gómez, que en diálogo con Doble Amarilla comentó como fue su llegada a tan exótico destino.
“El contacto fue a través de Instagram. Me escribió una gente que trabaja acá y para varios equipos. Lo resolvimos en una semana. Es un buen club que va a jugar Copa de Asia y por eso me entusiasmó”, relató el “Cura”, que firmó un vínculo por un año con el conjunto rojo y amarillo.
“Es un equipo que generalmente sale campeón. Es tratar de ganar la ligas y las copas que hay. Hoy ganamos una así que empezamos bien. Llegar lo más lejos posible a la Copa de Asia también es un objetivo”, ponderó el DT, además de apuntar que “el plantel es bueno, hay 15 jugadores en la Selección de Bangladés”. “Recién el domingo pasado entrené con el plantel completo así que hace cuatro días que estamos entrenando con el plantel completo”, subrayó.

Gómez comparte staff técnico con un grupo plenamente bengalí, que se fundó en el año 2013 y que concretó un ascenso meteórico en un puñado de años y que ya cuenta en su palmarés con cinco títulos de la Premier League, cuatro Federation Cup, tres Independence Cup y ahora dos Challenge Cup.
“La liga tiene muchos habitantes pero no tiene tanta pasión como tienen en Malasia o Indonesia“, citó el ex entrenador de Talleres de Escalada, Gimnasia y Esgrima de Jujuy, Deportivo Armenio, Ferro, Atlético Tucumán, Belgrano y Quilmes a la hora de evaluar el impacto y seguimiento de la población por los Kings, en un país, como ya se mencionó, con preferencias por el deporte de los “sixes”, los “stomps” y los “wickets”.
En el recuerdo queda el Mundial de Qatar, donde Bangladés fue una de las naciones foráneas que más apoyó a la Argentina en el camino a la conquista de la tercera estrella. Sin embargo, ese entusiasmo con Lionel Messi y compañía contrasta con las carencias de un campeonato local en relación a sus vecinos continentales.
“Hay diferentes categorías, la liga de Tailandia, China y Australia son más fuertes. Esta liga está en crecimiento y tiene buenos jugadores pero tiene que crecer todavía mucho más. Sobre todo el trabajo de inferiores, que es donde más diferencias hay con Sudamérica o Argentina en especial. No se trabaja bien porque no hay infraestructura para poder hacerlo”, señaló Gómez.
“Me comentaron que muchas de las canchas no tienen luz artificial y juegan temprano. Los únicos que tiene son el estadio nacional y el estadio nuestro”, añadió el protagonista apuntando que si bien “uno lleva el trabajo en cuanto a la técnica, táctica y orden y charlar desde el aprendizaje”, el contraste de la realidad es que “muchos jugadores llegan a Primera División en muchos países de Asia sin conceptos mínimos por no haber tenido buenas inferiores como sí tienen los jugadores argentinos”.
Roberto Carlos Mario, que está ahora acompañado sólo por un par de días de su hijo en Bangladés, reflexionó sobre sus años en Asia, el estilo de vida y las presiones comunes que a la larga afectan la labor de los entrenadores.
“En todos estos años me he sentido cómodo en esta zona de trabajo. Te tratan bien, he estado bien. Este equipo es uno de los mejores sino el mejor de Bangladés. La Copa de Asia es algo bueno que ya me tocó ganar en el 2015 con el Johor y te da prestigio”, marcó, a la vez que recalcó que siempre pudo empezar con el pie derecho sus experiencias en el continente.
“Salvo lo último más complicado más acá porque estábamos peleando el descenso y había mucha gente joven. En los demás equipos siempre me ha ido bien por suerte y no tuve el problema que a las cuatro o cinco fechas te quieren echar. Sino es como en todos lados, tenés que ganar”, comentó quién tomó esta oportunidad “por un tiempo”.
Gómez, y la visión de su querido Ferro que naufraga en el Ascenso

Como defensor nato, Gómez jugó 136 partidos y marcó tres tantos entre 1980 y 1987 en Ferro Carril Oeste. Bajo la tutela de Carlos Timoteo Griguol, de quién luego sería colaborador, Mario conquistó los recordados Nacionales de 1982 y 1984 con la casaca verdolaga.
Hoy, a la distancia, el club porteño atraviesa un delicado presente, con el descenso a la Primera B amenazante y una relación tirante entre sus hinchas y la dirigencia luego de un cuarto de siglo alejado de la Primera División. Desde el lejano Dacca, quién fuera DT de “Oeste” entre 2011 y 2012, analizó el presente de su antiguo club.
“Lo sigo siempre a Ferro. En el último tiempo he estado viviendo en Caballito cerca de mis hijos e iba siempre a la cancha cuando jugaban de local. Está en un momento complicado porque había armado un plantel para jugar otras cosas y lo tiene hoy peleando la permanencia. Ojalá pueda estar tranquilo y el próximo año poder estar mucho mejor”, explayó.
El otrora asistente de un histórico de la institución como Héctor Cúper describió que “la gente está muy nerviosa porque hace muchos años que no puede ascender”, pero destacó que “es un club que está bárbaro, es un club hermoso que tiene todas las instalaciones y disciplinas”. “Le falta solo esa posibilidad de estar en Primera División, que se lo merece. El fútbol no es merecimientos, hay que hacer muy buenas campañas y es cada vez más difícil en la Primera Nacional”, completó.