La pregunta que todos se hacen, pero al mismo tiempo todos tienen la respuesta. Este domingo Abel Balbo dejó de ser el entrenador de Central Córdoba dejando un mar de dudas, una mala posición en la Copa de la Liga y un promedio que preocupa.
Pero además, en la campaña que viene realizando el equipo en esta temporada, se pudo visualizar las pobrísimas individualidades que hay en el plantel. Los jugadores no están a la altura de Primera División, de Central Córdoba y de la camiseta “ferroviaria”.
Mas allá de algunas insinuaciones en la victoria con Sarmiento de Junín, en todos los partidos no hubo alguien que rompa el molde. Bajas performances, falta de ganas, indicios de que esto va de mal en peor, es lo que arroja el paso de Balbo y sus jugadores en esta temporada.
Verdaderamente, el que tome “este hierro caliente” deberá trabajar in extremis en este tema. Hay que levantar el nivel de los jugadores así se pueda devolver la confianza que todo el pueblo “ferroviario” depositaronn en ellos.
Se vienen días duros y difíciles.