La vida lo golpeó muy fuerte y de forma inesperada allá por el 2016. Fue un duro trance que requirió de acción médica, entereza, fe, contención, esperanza y tomar la decisión final. Rita Elizabeth Gerez tuvo que pasar momentos duros con el fallecimiento de un nieto, de 11 años. Hoy a los 71 años (los cumple este viernes 20 de junio) volvió a ver la luz, quizás la luz divina, que la envolvió, la abrazó y la depositó en el básquet, un viejo amor que lo tenía desde los 13 años y que por circunstancias de la vida, lo había dejado allá por 1974.
“Un día le pedí a Dios que me haga desistir de los malos pensamientos que tenía tras la muerte de mi nieto y gracias a Él se cruzaron viejas amigas que tenía cuando jugaba al básquet y me invitaron a formar el equipo de Las Pichis, en 2021, cuando la pandemia nos permitió juntarnos. Fue lo que me devolvió la vida”, fue el preámbulo en la charla con sgosports.com.ar.
-¿Cómo es jugar al básquet a los 71 años?
-“Fue mi pasión desde muy chica. Vengo de una familia de basquetbolistas, mis hijos jugaron en Juventud BBC y luego dejaron por razones de trabajos y estudios. Ahora juegan sobrinos. Inicié este deporte a los 13 años y durante esos años tuve la oportunidad de jugar en torneos Regional y Nacional en varias categorías”.
-Tuviste que dejar muchos años y ¿porqué volviste a jugar?
-“Allá por 1974 tuve que dejar el básquet porque estaba de novia y al año siguiente me casé por lo que las obligaciones no me permitían seguir con el deporte ya que vinieron los hijos, luego tuve que trabajar y una triste historia de vida que tuve en 2016, me dejó con mucha tristeza, con depresión y cuando toqué fondo tuve que tomar una decisión: o era salir de ese fondo o directamente no seguir en esta vida, es una realidad que hoy la cuento porque el momento es otro. Un día vino Clarita Agüero, una vieja amiga que jugaba al básquet conmigo en ese momento, para invitarme a crear este equipo de básquet en categoría +60 y no dudé en aceptarle. Llegó en el momento justo porque mi vida era un mar de tristeza. Nos juntamos en el club Mariano Moreno y con el correr de los años juntamos el grupo de Las Pichis”.
-El básquet te salvó la vida entonces.
-“Totalmente. Volví a vivir. Después de la partida de mi nieto, caí en un pozo depresivo. Volver al básquet me permitió volver a darle sentido a la vida, a cerrar capítulos y abrir otros que me quedaron cuando jugaba en mi adolescencia. Hoy me siento plena y satisfecha de hacer lo que me apasionó desde muy chica”.
-¿Cómo empieza la historia de Rita Gerez en el básquet?
-“Allá por 1968 cuando primos de Tucumán, que jugaban al básquet, me insistieron en que jugara. Un tío, Juan Angel Valdez, era árbitro Nacional e Internacional, dirigió hasta con González Trilla, me inculcó incursionar en este deporte. Comencé en el club Sáenz Peña, que hoy no existe, jugando con algunas chicas que con el correr del tiempo armamos el equipo. Jugaba, trabajaba y estudiaba hasta que los tiempos no me permitieron seguir jugando. Fui la única jugadora del club Sáenz Peña seleccionado para jugar por nuestra provincia en un torneo Argentino en Juveniles”.
-Ahora se viene un torneo Nacional en Buenos Aires, ¿como tomas ese evento?
-“Es un desafío y al mismo tiempo es volver a vivir momentos como los que viví cuando era una niña. En el equipo están Silvia Juárez y Clarita Agüero que jugaron conmigo en épocas de juveniles y siguen haciéndolo en este equipo. Es un grupo lindo que trataremos de disfrutarlos”.
-¿Te imaginabas a los 71 años jugando al básquet?
-“Nunca, aunque siempre me ilusionaba con volver a jugarlo, pero con el correr del tiempo ese sueño como que se me había ido. No se puede decir con palabras lo que se siente jugar torneos regionales, nacionales a mi edad”.
MIRA A RITA JUGANDO A LOS 71 AÑOS
¿Cuál es la clave de seguir practicando un deporte activo y de un ritmo vertiginoso como el básquet a tu edad?
– “La fuerza de voluntad. Estuve muy mal, con un tratamiento terrible y cuando me dijeron que mi situación era muy malo, tuve que tomar la decisión de cambiar mi estilo de vida y sabía que lo iba a lograr. Tuve que hacer algo por mí y hoy me siento muy especial porque tengo ganas de vivir con mucha felicidad y el básquet es eso. Me siento muy feliz”.
-¿Ese sería el mensaje para las personas de tu edad que pasan situaciones extremas?
-“Asi es. Es tomar decisiones y hacerlas con mucha actitud. Hay que hacer cosas que les haga bien, un deporte, una actividad que les devuelva las ganas de luchar. Dije voy a poder y lo logré. Es cuestión de tomar decisiones y tener actitud para cumplir con esa decisión. Trabajé toda mi vida y soy una persona activa que me permiten hacer todo lo que tengo que hacer. Ser positiva en todo sentido”.
