El defensor rompió lazos con los hinchas por la insólita expulsión ante Fluminense en la Copa Libertadores. Por su parte, el Pipa culminó el año más flojo durante su camino en el Xeneize. Esperarán ofertas el próximo mercado de pases.
Pasadas varias horas desde la caída por 2-1 ante Fluminense en el Maracaná, Boca tendrá que sentar cabeza y analizar cómo encarará el 2024 si logra clasificar a la próxima Copa Libertadores, a la que todavía no pudo acceder ni por ser el campeón del certamen ni por haber ganado el título argentino.
Lo que es seguro es que el plantel sufrirá una renovación profunda que podría conllevar ventas de jóvenes valores del club al exterior y fines de ciclo para algunos jugadores con vasta trayectoria que quedaron marcados por la final en Río de Janeiro.
Por ende, Frank Fabra y Darío Benedetto estarían en la mira durante estos meses de decisiones y negociaciones.
El colombiano tuvo un partido para el olvido el pasado 4 de noviembre. En el segundo tiempo del alargue, el cuadro de la Ribera tenía la oportunidad de aprovechar ese hombre más en la cancha tras la insólita expulsión del delantero brasilero John Kennedy, autor del gol del título.
Sin embargo, la ilusión de ir a buscar envalentonado un empate apoteótico se hizo trizas a los 111 minutos. Luego de una acción polémica en la que todo Boca reclamó penal, Fabra le dio un cachetazo de manera irresponsable a Nino, capitán rival, y se hizo expulsar con la mitad del alargue por delante.
Esta actitud del colombiano detonó la relación con los hinchas, quien entró al top 10 de los jugadores de Boca con más cantidad de compromisos disputados en la Copa Libertadores.
En el frente delantero, el Pipa podría ser otra de las salidas de cara al rearmado del plantel el año que viene.
Fue el año más decepcionante que registró durante sus dos etapas (2016-2019 y 2022 en adelante) en el Xeneize. Hizo nada más que seis goles en los 38 partidos que jugó, unos números mejores que los de Edinson Cavani, que arribó al club en julio, pero peores que los de Miguel Merentiel, que se afianzó como el goleador de la Era Almirón gracias a sus 13 anotaciones.
También es una realidad que Benedetto no logró el rodaje que esperaba en el 2023. En los primeros compromisos del campeonato se ausentó por la suspensión de cuatro fechas que le cayó tras la expulsión en el Trofeo de Campeones contra Racing.
Luego, un desgarro en el isquiotibial derecho lo marginó de los encuentros que se jugaron entre fines de abril y principios de mayo, incluido el Superclásico con River en el Monumental.
Finalmente, casi se queda afuera de la gran final debido a una contractura que sufrió contra la Academia en el Cilindro de Avellaneda.
